Cuando el estrés se convierte en parte de tu vida, es clave encontrar formas de no dejar que te controle. Una excelente alternativa es la meditación, una práctica que te ayuda a reducir el estrés, mejorar la concentración y aumentar tu bienestar general. Para cuidar de tu salud mental y física, te compartimos algunos pasos sencillos para empezar a meditar en casa. ¡Con solo unos minutos al día, notarás una gran diferencia en tu energía y tranquilidad!
- Busca un lugar en tu casa donde puedas sentarte cómodamente y en el que no encuentres distracciones.
- Elige un momento del día en el que estés tranquilo y sin distracciones.
- Usa ropa que te permita sentarte cómodamente, en el piso, en un cojín en posición de loto.
- Cierra los ojos y comienza a enfocarte en tu respiración.
- Inhala profundamente por la nariz y exhala lentamente por la boca.
- Concéntrate en tu respiración y trata de dejar ir cualquier pensamiento o distracción.
- Puedes usar un mantra o frase para que te ayude a enfocarte y mantener la concentración.
Mantén la calma y la paciencia, esta es una práctica que requiere de estas características. No te desanimes si tu mente se distrae y trata de enfocarte nuevamente en tu respiración.